Dosis de Animo

¡Watxkal kufamilia yetoj kuwatxil anima! ¡Cómo están nuestros amigos y familia! Lo sentimos que no habíamos tenido oportunidad de escribirles esta semana que paso. Tenemos varias experiencias súper animadoras que nos gustaría compartir con ustedes. Sobra decir que las personas en Guatemala tienen un gran aprecio por nuestra labor.

La semana pasada fui a dar clases a una Señora que se llama Olga. Ella no sabe nada de español y tampoco sabe leer. Entonces cada vez que voy, tengo que llevar a una hermana que habla Akateko para que me ayude a traducir. Nos pusimos como meta ensenarle español y el abecedario después de su curso bíblico. Olga es muy inteligente y está aprendiendo bastante rápido, pues esta semana que paso su mama se sentó en las clases por primera vez. Las dos se la pasaron súper bien riéndose y disfrutando de mis disparates que digo en Akateko. Bueno al irnos de su casa la mama de Olga me llama a mí y a mi compañera a que regresemos. Le preguntamos que pasaba y nos dijo que hacía mucho calor y que nos quería dar algo para que compráramos agua. No sé porque ella no nos ofreció agua de su casa, pero ella saco 10 quetzales lo equivalente a 1 dólar y cambio. Nos dijo que por favor tomáramos el dinero ya que nos lo daba de corazón.

Obviamente mi reacción fue decirle que no, no tenía que hacer eso. Pero ella de verdad insisto tanto y aceptamos el dinero. Al caminar a casa, se me soltaron las lágrimas de emoción. Por primera vez de verdad pude ver cuánto aprecio sienten las personas porque vamos a sus casas a ensenarles de Jehová. Me pongo a pensar como este es un país bastante pobre y no cualquier persona te va a dar dinero porque si, de verdad que aprecian lo que hacemos. Esta experiencia me inyecto una dosis de ánimo increíble y otra vez me enseño porque estamos aquí. Porque todavía hay mucha gente con corazones dispuestos queriendo aprender de Jehová. Y si ellas aprecian nuestros esfuerzos, ¡cuánto mas no lo hará Jehová!

Este sábado que paso decidimos predicar en un territorio cerca de nuestro Salón del Reino, llamado Yulaja. La hermana que era nuestra guía nos dijo que no estaba muy lejos y que solo predicaríamos a un ladito de la montaña. Bueno no sabíamos lo que nos esperaba. Comenzamos a bajar una gran colina de concreto que nos tardamos por lo menos unos 10 minutos en bajar. La primera casa en la que hablamos Elvin y yo era una familia compuesta de papa, mama e hijos y abuelo. Todos nos prestaron mucha atención cuando les hablamos, le preguntamos al papa que cuando podíamos volver para seguir hablando de la Biblia. El señor nos dijo que podíamos volver el próximo sábado a las 8 de la mañana ya que él se va a trabajar al pueblo. Y no adivinan cuál es su trabajo, él trabaja como un auxiliar del alcalde, es uno de esos hombres que llevan esos palitos con barbitas. Esos hombres que tienen esos trabajos tienen que ser “hombres respetados por pueblo”. Quien iba a pensar, ¡que gente con puestos de “autoridad” serían tan receptivos!

Bueno la hermana nos dice: “de esta casa solo bajamos este caminito”, no les mentimos caminamos 10 mil pasos en total la subida y la bajada. ¡Pero qué territorio tan más receptivo! En varias casas en las que predicamos y enseñamos los videos se juntaban todos los de la familia para escuchar y ver el video. Yo dije en una casa “pues no sé cuándo volveré porque está un poquito lejos su casa”, cuando me doy cuenta que Elvin le promete a otro señor que volveríamos este sábado que viene (cara sudando a chorros) haha. Solo para que se den una idea de la resistencia de nuestros publicadores en la predicación. Con nosotros estaba Estercita una niña de 3 anos, su abuelita como de 60 y pico de anos y 2 otras hermanas. Pues todas caminaron toda la montaña de bajada y subida, hacía un calor increíble y Elvin casi se desmaya. Se sintió súper mareado y sin fuerzas, al subir a Estercita por fin le salen sus 3 años de edad. Empieza a decir: “ay ya no puedo, me voy a morirme” que niño de 3 anos en Estados Unidos caminaría 10 mil pasos y ya de subida diría eso? haha. Todas ellas son un gran ejemplo para nosotros, si ellas pueden nosotros también podemos caminar todo eso y más para predicarle a las personas.

Cada territorio tiene sus ventajas y desventajas, pero todo territorio tiene personas deseosas de conocer a Jehová. Esperamos seguir escalando montañas y seguir encontrando a ‘todos aquellos que están dispuestos para la vida eterna’. Deseamos que en sus respectivos territorios hagan lo mismo, y cuando sientan que no tienen animo ni fuerzas piensen en Estercita y su abuelita =)

Con mucho amor Elvin y Natalia ❤

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  Noemi

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  Byron y Benja

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  Sopa de Chikay

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  De regreso a casa

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  Chikay predicando

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  Estercita y su abuelita

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  Chilacayote con maíz

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  Camino a casa

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  White peacock!

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  Mood

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  Familia Ren

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  Aldea Achi

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  Giant Uno

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  Ku na

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  Vista en la tarde

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  Vecinos

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  Lugar de conmemoración

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  Los bebes

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  Bajada a Yulaja

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  Primer ardilla que vimos

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  bajada a yulaja

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  ???

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  Estercita con los bebes

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  Nubes

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  Mi oficina

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  Predicación en Los Molinos

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  Miel de Caña

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  Kab’ Chej

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  Grupo en Achi

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  Elvin